Remontando el río Cajigar, a seis kilómetros de Tolva y desde un acceso carretero que conecta con Castigaleu, se encuentra el pueblo de Luzás y su admirable conjunto arquitectónico. Sobre un tozal contempla las vistas de los macizos pirenaicos tras superar la barrera de la Sierra de L'Armellera.
La silueta de la torre de su castillo distingue la población junto a la Iglesia parroquial de San Cristóbal, ambos reflejo del pasado medieval fronterizo en los primeros compases del Reino de Aragón (s. XI). El cuidado de sus casas permite un paseo por las construcciones típicas de la zona oriental de Ribagorza.
La agricultura y la ganadería subsisten como principal actividad económica, junto a pequeñas huertas familiares y un pequeño viñedo.
La ermita de San Bendito, en el camino que avanza hacia Lascuarre debajo de la sierra, es otro de las joyas del patrimonio de Luzás.
